OSTEOPATÍA PEDIÁTRICA
Es una especialidad de asistencia sanitaria con los mismos objetivos que la osteopatía general, pero desarrollada exclusivamente para bebés y niños pequeños. Contribuye a mejorar los trastornos de movilidad, elasticidad y funcionamiento de las estructuras del cuerpo del niño. Estas disfunciones pueden ser del aparato locomotor, viscerales y craneales.
Sus resultados son eficaces a corto y largo plazo, siendo una terapia rápida y de fácil aplicación. Valoramos el cuerpo en su totalidad, no sólo donde duele. Estas terapias son desarrolladas por personal titulado y especializado en osteopatía pediátrica.
PROTOCOLO A SEGUIR
En la primera visita, el osteópata pediátrico recabará distintas informaciones como la evolución del embarazo, nacimiento del bebé, estado actual del niño y todos los datos que sirvan para elaborar el diagnóstico. Una vez establecido se definirán las pautas y tratamientos más adecuados para el niño.
¿PARA QUÉ ESTÁ INDICADA?
- Bebés con cólicos del lactante, regurgitaciones, vómitos, gases, estreñimientos, diarreas.
- Bebés y niños afectados por trastornos del sueño y nerviosismo.
- Bebés y niños con trastornos musculares como tortícolis y contracturas.
- Bebé con trastornos respiratorios o de la deglución.
- Bebés con tortícolis congénita.
- Bebés con deformaciones craneales, plagiocefalia, braquicefalia y escafocefalia entre otros.
- Niños con lesiones de ligamentos como esguinces o distensiones.
- Niños con bloqueos vertebrales.
- Niños con escoliosis o asimetría en el movimiento de las extremidades o problemas de pies.
- Niños con dificultades en el ámbito de la motricidad.
- Niños con trastornos reiterados del aparato respiratorio o del oído: otitis, bronquitis, brocoespasmos, asma…